CMT – Cold Metal Transfer
Resultados excelentes en cualquier material con un arco voltaico altamente estable.
El proceso CMT (Cold Metal Transfer) ha revolucionado el mundo de la soldadura. Entre sus ventajas están una menor aportación de calor, deformación y formación de proyecciones, así como un control sumamente estable del arco voltaico, un desprendimiento de gota controlado con precisión, y una unión de láminas finas, incluso recubiertas, además de metales de distintos tipos y grosores. Con CMT Pulse, combinación del proceso CMT con arco voltaico pulsado, el rango de potencia aumenta. Este proceso ofrece a los usuarios cualquier valor disponible en la gama de energía entre el proceso CMT y el arco voltaico pulsado. Además, se produce una mayor estabilidad del proceso incluso durante la técnica del arco voltaico pulsado, gracias a las ventajas de la tecnología de regulación del proceso CMT.
Fronius y los usuarios piloto han probado este proceso en la soldadura de láminas de cromo-níquel con espesores de 0.5 a 3.0 mm y aleaciones de aluminio, como campos principales de aplicación para el proceso CMT Pulse. El usuario puede elegir el grado de aportación de calor en toda la gama de soldadura CMT y arco voltaico pulsado. De esta forma se eliminan las limitaciones de potencia del proceso CMT, a la vez que se conservan sus ventajas.